Pasión, equilibrio, colores, matices como vínculo entre el arte y la arquitectura interior.

Procedente del ámbito artístico, he sabido combinar mi amor por las formas, los materiales y los colores con un perfecto dominio del espacio, creando interiores llenos de poesía y armonía.

Mi pasión por el arte comenzó a temprana edad, cuando me perdía en libros y exposiciones, fascinado por las texturas de las pinturas, los matices de las esculturas y la forma en que los artistas daban vida a sus visiones. Esta herencia artística está hoy en el centro de mi enfoque como diseñadora de interiores. Para mí, cada espacio es un lienzo en blanco, una oportunidad de sublimar lo cotidiano a través de composiciones únicas, donde las líneas arquitectónicas se convierten en obras por derecho propio.

Fundador y director artístico de mi agencia, dirijo cada proyecto con minuciosa atención, inculcando mi sensibilidad en mis colaboradores. Mi formación artística se refleja en cada uno de los diseños: me gusta jugar con los volúmenes, las texturas y la luz para crear atmósferas elegantes y cálidas. Los materiales que selecciono, a menudo procedentes de artesanías y elegidos por su autenticidad, cuentan una historia y dan alma a cada pieza.